El Jamón Ibérico, exquisito y saludable.
En Villar fabricamos jamones y paletas desde 1960. Y lo hacemos convencidos no solamente de hacer un producto delicioso y de gran tradición gastronómica, sino también de aportar soluciones de alimentación saludable. Promovemos un consumo moderado de 2 o 3 veces a la semana y como complemento de una dieta variada y rica en proteínas, vitaminas y minerales esenciales para el desarrollo del organismo.
Además del placer de consumir un alimento exquisito y de calidad, sus principales propiedades nutricionales lo hacen objeto de recomendación no solo de gourmets sino también de nutricionistas.
El jamón ibérico es una propuesta excelente de sabor a las comidas de los niños y jóvenes a la vez que aportamos muchos de los nutrientes necesarios para su desarrollo. El jamón ibérico contiene una gran riqueza en proteínas y grasas, así como en minerales y vitaminas liposolubles. Es un alimento especialmente recomendado para el desarrollo muscular.
El jamón ibérico contiene elevadas cantidades de ácidos grasos monoinsaturados como el ácido oleico. Es el principal componente del aceite de oliva, grasa saludable a la que se le atribuyen gran parte de los beneficios de la dieta mediterránea que pasa al cerdo a través de las bellotas. El jamón ibérico es un alimento bajo en calorías y rico en vitaminas, que nos aporta un 50% más de proteínas que la carne fresca.
Es un alimento cardiosaludable, ya que los ácidos grasos que contiene contribuyen a disminuir los niveles de colesterol. Facilita al organismo la producción de HDL (colesterol “bueno”), reduciendo al mismo tiempo el LDL (colesterol “malo”).
El jamón ibérico es también un alimento rico en hierro, magnesio, zinc, calcio y fósforo. Su consumo aporta casi la mitad de hierro necesario diariamente y constituye una gran fuente de vitaminas B1, B2, B3 y B6. Su contenido en vitamina E es un poderoso antioxidante.
Un consumo moderado de jamón ibérico no perjudicará las dietas bajas en calorías. Por cada 100 gramos de jamón ibérico de bellota, el aporte calórico es de unas 250 kcal, por lo que un consumo moderado no perjudicará las dietas bajas en calorías.
Desde Villar animamos a la adquisición de hábitos saludables, como es sin duda consumir jamón ibérico. Su disfrute dos o tres veces por semana en cantidades moderadas ayudará a recibir el aporte de nutrientes, vitaminas y minerales esenciales para nuestra salud.
